lunes, 19 de mayo de 2014

El miedo del silencio

Querid@ companer@,

¿Cual es tu objetivo final en tu practica de las artes marciales?

¿Quieres ser un hombre (o mujer) violento (o violenta), sembrando dolor y sufrimiento en su entorno?
¿Quieres aumentar la importancia de tu orgullo, de tu Ego falso y de tu amor propio?

No lo creo.

Hablando con nuestros alumnos jovenes digo cada vez que nosotros no somos deportistas pero ARTISTAS marciales.
¿Que significa ser un ARTISTA marcial para mi?
Significa que, a través de la practica del karate-do y del kobu-do, me empeño de transformar mi cuerpo en una obra de arte. Pero como mi cuerpo es la manifestación al mundo exterior de mi fuerza vital interior, significa que la transformación de mi cuerpo es imposible sin transformación de mi alma y de mi mente.
Durante un curso de kyusho en Benissa, maestro Miguel Gomez nos confirmaba la importancia de ésta transformación interior.
Como ARTISTA marcial es nuestro deber de siempre evitar el uso de la violencia.
Hablando de su juventud, sensei Miguel Gomez nos ha dado un ejemplo muy claro. Su dojo se encontraba en una calle donde había tambien un bar que era punto de encuentro de bravucones. En lugar de pasar cada vez por delante de éste bar, sensei Miguel pasaba por otra calle lo que era solo un pequeño rodeo. De ésta manera evitaba todo riesgo de violencia.

Si has leido mis articulos sobre los maestros Matsumura y Itosu, sabes que ellos tenian los conocimientos, la sabiduría, la intuición, la sensibilidad y el estado emotivo de madurez emocional para poder evitar la violencia en cualquier circonstancia.

¿Pero como podemos nosotros empezar a trabajar por la transformación de nuestra mente y alma?
Sensei Miguel Gomez nos ha indicado claramente una posibilidad:
Podemos empezar a través de la tecnica del mokuso, lo que significa "meditación" en japonés.
Es decir que si aprendemos a meditar, podemos empezar a conocer verdaderamente nosotros mismos. Porque meditando aprendemos a escuchar la voz interior de nuestro alma. Desafortunadamente la gran mayoría de la gente prefiere quedarse en un estado permanente de inconciencia enterrando su voz interior por debajo de un diluvio de ruido de alta voces, de telebasura y de sus propios gritos. En un mundo dedicado a la distracción, el silencio y la quietud nos aterrorizan, y nos protegemos(?) de ellos no solo por medio del ruido, pero tambien por medio de las ocupaciones frenéticas. Contemplar la naturaleza de nuestra mente es lo último que nos atraveríamos a hacer. Nos asusta mirar hacia dentro, porque nuestra cultura no nos ha dado ninguna idea de lo que vamos a encontrar.

¿Pero que es la meditación?
Aqui por debajo tienes la explicación dado por el maestro Sogyal Rimpoche en su obra "El Libro Tibetano de la Vida y de la Muerte" que es la traducción en Español del libro original "The Tibetan Book of Living and Dying".

"El proposito de la meditación consiste en despertar en nosotros la naturaleza de la mente e introducirnos a aquello que en realidad somos, a nuestra conciencia pura e inmutable que subyace a la totalidad de la vida y de la muerte.
En la quietud y el silencio de la meditación, vislumbramos esa profunda naturaleza interior que hace tanto tiempo perdimos de vista entre la agitación y la distracción de nuestra mente, y regresamos a ella. Resulta verdaderamente extraordinario que nuestra mente no pueda estarse quieta más de unos pocos instantes sin anhelar distracción; es tan inquieta y desasosegada que a veces pienso que, al vivir en una ciudad del mundo moderno, ya somos como seres torturados...
¿Que nos dice eso de nuestra forma de vivir?
Estamos fragmentados en muchos aspectos distintos. No sabemos quién somos en realidad, ni con qué aspectos de nosotros mismos deberíamos identificarnos ni en cuáles creer. Son tantos los dictados, voces y sentimientos que luchan por controlar nuestra vida interior que nos encontramos dispersos por todas partes, en todas direcciones, sin dejar a nadie en casa.
La meditación, pues, es llevar la mente a casa.
LLevar la mente a casa significa llevar la mente al estado de morar en calma mediante la practica de la presencia mental. La meditación es la auténtica práctica de la paz, la auténtica práctica de la no agresión y de la no violencia, el verdadero y mayor desarme.

Leer algo sobre la meditación está bien. Pero aprender como hacerlo es mucho mejor. Hay varias posibilidades. Durante la celebración del Dia Internacional de la Mujer en Benissa habia por ejemplo dos talleres de meditación.
Te invito a tomar contacto conmigo (teléfono 690192976) si quieres acompañarme un sabado a una session de meditación (es gratis) en la Fundación Sakya en Pedreguer. Una docena de amigas y amigos lo han hecho ya.

Hasta pronto.

Un abrazo de Bruno