sábado, 13 de julio de 2013

Sabiduria de un indio americano

Varios veces he leido el libro "The Divine Matrix" de Gregg Braden, que ha sido traducido en Español como "La Matriz Divina". En este libro podemos encontrar la prueba que los maestros espirituales antiguos sabían yá lo que nuestros scientificos están "descubriendo"(?) ahora mismo.

Abajo te ofrece un poco de sabiduria de un indio americano.

Hace mucho tiempo, nuestro mundo era muy distinto a como es hoy en dia. Había menos gente y vivíamos más cerca de la tierra. La gente conocía el lenguaje de la lluvia, de las cosechas y del Gran Creador. Sabían cómo hablar con las estrellas y con los seres del cielo. Comprendían que la vida era sagrada y que era producto del matrimonio entre la Madre Tierra y el Padre Cielo. En esa época había equilibrio y la gente era feliz.
Luego, algo ocurrió.

Nadie en verdad sabe por qué, pero comenzaron a olvidar quiénes eran. Con el olvido, comenzaron a sentirse separados, separados de la tierra, de los demás, y hasta de su creador. Se perdieron y deambularon por la vida sin dirección ni conexión. En su separación, creían que tenían que pelear para sobrevivir en este mundo, y defenderse contra las mismas fuerzas que les habían dado la vida, en la que habían aprendido a vivir en armonía y confianza. Muy pronto, usaron toda su energía para protegerse del mundo que los rodeaba, en vez de hacer las paces con su mundo interior.
Aunque habían olvidado quiénes eran, en algun punto su interior permanecía el don de sus ancestros. Todavía les quedaba un recuerdo que vivía con ellos. En sus sueños sabían que poseían el poder de sanar sus cuerpos, de atraer la lluvia cuando fuera necesario y de hablar con sus ancestros. Sabían que de alguna manera podían encontrar de nuevo su lugar en el mundo de la naturaleza.
Mientras intentaban recordar quiénes eran, comenzaron a construir cosas fuera de sus cuerpos para recordarles quiénes eran en su interior. Con el paso del tiempo, incluso construyeron máquinas para curar a las personas, crearon químicos para hacer crecer sus cosechas, y extendieron cables para comunicarse a través de largas distancias. Cuanto más se desviaban de su poder interior, más se enredaban sus vidas externas con las cosas que creían que los harían felices.
Parece que cuanto más nos alejamos de nuestra relación natural con la tierra, con nuestros cuerpos, con nuestros semejantes y con Dios, más vacíos nos volvemos. En ese vacuidad, nos esforzamos por llenar nuestro vacío interior con "cosas".
Puede ser que con los equipos electrónicos y las actividades recreativas, nos estamos desviando de nuestro poder de llevar una vida enriquecedora, sana y significativa.

¿Y tu qué crees?

Personalmente creo que hé encontrado una combinación perfecta para poder llevar una vida enriquecedora, sana y significativa: es la combinación de las artes marciales con el trabajo espiritual en un circulo de hombres.

¿Cual es tu combinación?

Un abrazo de Bruno