jueves, 16 de enero de 2014

Más información sobre maestro Matsumura

Despuès de haber leido mis articulos sobre maestro Matsumura (o Matsumora) vari@s amig@s me han preguntado de publicar más información sobre su vida.
Amig@s mios es un verdadero placer para mi de poder ofreceros el articulo seguiente.

Matsumora Kosaku nació en 1829 en la ciudad de Tomari en la isla de Okinawa. Su familia pertenecía a la nobleza, siendo descendientes indirectos del primer rey Sho. Matsumora estudió Chino y Confucionismo en la escuela de Tomari, como correspondía a alguien de su posición.
Matsumora comenzó su aprendizaje de karate de la mano del maestro Uku Giko con el que estudió durante tres años. Con el maestro Giko aprendió los principios básicos del arte, los desplazamientos y poniendo gran énfasis en la movilidad de las posiciones (para ejecutar tai-sabaki) y el desarrollo de poder a partir de la rotación de las caderas para generar potencia. El maestro Giko enseñó a Matsumora los kata Naihanchi, Passai y Wanshu. Posteriormente Matsumora estudió con el maestro Teruya Kishin, que le enseñó los katas Wankan y Rohai. El maestro Teruya quedó muy impresionado por la habilidad del joven Matsumora y le ofreció enseñarle en el panteón familiar. Este era un gran honor para el joven Matsumora teniendo en cuenta que en esa época estaba prohibida la práctica del karate y éste se entrenaba en el más absoluto secreto, siendo frecuentes los entrenamientos durante la noche.
Cuando Matsumora tenía cerca de veinte años, tuvo lugar un enfrentamiento con un Samurai del Clan Satsuma. Matsumora logró desarmar al Samurai, lanzando su espada a un río, aunque durante el enfrentamiento Matsumora perdió un dedo de la mano. Para un Samurai la pérdida de su espada a manos de un nativo de Okinawa era sin duda una desgracia y un deshonor.
Debido a este enfrentamiento Matsumora tuvo que esconderse durante algún tiempo. Si los oficiales de Satsuma venían a buscarle sería fácil encontrar a un hombre con un dedo amputado recientemente. Por este motivo Matsumora dejo Tomari y se escondió en Nago en el distrito de Asahikawa. Después de varios años Matsumora regresó a Tomari.
Matsumora estudio también el uso del "Bo" o palo largo y el "Jo" (palo de unos 128 cm de longitud) de los que llegó a alcanzar una gran maestría. Estudió "jigen-ryu jojutsu".
El maestro Matsumora Kosaku fue sin duda uno de los más importantes maestros de Karate de la ciudad de Tomari y tuvo notables alumnos que más tarde llegarían a ser grandes maestros, entre los que se encuentran Yamazato Giki, Kuba Koho, Iha Kodatsu, Choki Motobu o Chotoku Kyan.
En una entrevista realizada a Choki Motobu en 1936 por el periódico "Ryukyu Shinpo", describía a su maestro Matsumora elogiando su fortaleza: "Matsumora de Tomari media cerca de 5 pies y 4 pulgadas de altura (1 metro y 63 centímetros), cerca de 1 pulgada (2'5 centímetros) más alto que nosotros, y pesaba cerca de 159 libras (72'6 kg). El parecía como un gran jarro! Su karate era totalmente diferente del de Itosu. Si hablamos de su fuerza física, Matsumora era igual que Sakuma; era un practicante realmente potente, era un bushi."
Matsumora Chikudon Peichin Kosaku falleció en 1898 y sería recordado en Tomari por su continua lucha contra las injusticias que el pueblo de Okinawa sufrió de manos de los Satsuma. Al día de hoy hay un monumento que lo recuerda en Tomari.
Otro historia que se cuenta de Matsumora, y que también hace referencia a la dimensión heroica que su figura adquirió en Okinawa, cuenta que una noche mientras practicaba en el mausoleo de la familia Teruya, un transeúnte se detuvo a observar sus movimientos. Matsumora se le acercó y el hombre se disculpó por molestar, elogiando sus habilidades y entregándole un trozo de papel, pero antes que el maestro hubiese terminado de leer, el desconocido había desaparecido. Matsumora mostró el papel al maestro Teruya quién respondió “Exactamente”. Algún tiempo después Kosaku Matsumora tuvo un destello de inspiración y en un momento comprendió el significado más profundo del mensaje “La esencia del budo es denunciar el pensamiento inmoral, la comprensión de la humanidad, siguiendo un camino virtuoso y dedicar su vida a cultivar la paz en Okinawa”. Este hecho que parece incongruente en tanto que no se explica qué decía el mensaje, ni por qué con el tiempo Matsumora llegó a esa revelación, es no obstante otra muestra de lo que significaba su personalidad como pacificador en Okinawa.


Un saludo cordial de Bruno